lunes, 8 de octubre de 2012

AURICULOTERAPIA


La terapia de la oreja o Auriculoterapia es muy sencilla de manejar, con resultados rapidísimos. No necesita un lugar especial para su tratamiento, es muy útil en los primeros auxilios así como en las enfermedades crónicas orgánicas y psicosomáticas.

Los efectos que provoca un órgano o área afectada o enferma, se manifestarán por síntomas, enviándolos normalmente a las zonas en que trataremos el problema (en este caso la oreja) por medio de la aplicación de agujas, tachuelas o balines con un mensaje de curación hacia el órgano o área afectada. Pero, no solamente será un mensaje físico, por el movimiento o presión que realicemos sobre la parte tratada de la oreja, sino que debemos considerar a esa zona un medio por el cual expresamos nuestro deseo e intención de curar. Este deseo o intención de curar es una parte primordial de la Auriculoterapia.

Desde hace muchos siglos, los orientales practicaban la acupuntura y sabían que cuando un órgano se enferma, aparecen distintas señales de esto, como zonas pálidas, lunares, granos, manchas, etc., exactamente en el sitio de la oreja que corresponde a ese órgano o área afectada, y que desaparecerá al mismo tiempo que la afectación.




El naturopata, al observar o palpar estos sitios, puede encontrar puntos dolorosos, más sensibles que otros, granos, zonas más cálidas o más frías, deformaciones, etc., los que le ayudarán a formarse un diagnóstico y / o tratamiento adecuado. Es interesante hacer notar que esta terapia se maneja de acuerdo a los mismos principios que la medicina tradicional china, o la ley de los Cinco Elementos, y la Teoría de los Meridianos.